
Ayer lunes 15 de noviembre entró en vigor la orden de confinamiento para los cerca de 2 millones de personas que aún no están vacunadas contra la COVID-19 en Austria.
Esta medida impuesta por el Gobierno se da tras el alza del número de contagios y, con esto, esperan que se impulse la vacunación de, por lo menos, el 35 % de los que aún no están inmunizados.
Las restricciones van hasta, al menos, el 24 de noviembre y las deben de acatar las personas mayores de 12 años que no tienen un certificado de vacunación válido o no se han recuperado de una infección del SARS-CoV-2 en los últimos 180 días.
Excepciones
Solo podrán salir de sus viviendas para determinados fines, como satisfacer necesidades básicas, ir al médico o a los centros de vacunación, o pasear y hacer ejercicio al aire libre.
Asimismo, pueden ir al trabajo, siempre y cuando presenten allí cada día un test PCR negativo que no debe tener más de 48 horas.
Multas
Lo que está prohibido es asistir a tiendas no esenciales, peluquerías, restaurantes, bares, gimnasios y eventos. De hacerlo, pueden ser multados con 500 hasta 1.450 euros.