La tierra sigue temblando. Esta vez se produjo un sismo de 7.2 en Filipinas, que hasta ahora va dejando 18 heridos y múltiples daños materiales El Servicio Geológico de Estados Unidos informó que el terremoto tuvo como epicentro a la isla de Burias.
Funcionarios del país asiático han negado que exista una amenaza de “tsunami destructivo”. El sismo que tuvo una profundidad de 70 km, había generado una alerta de tsunami menor para Australia, Indonesia e India,
El fuerte sismo provocó el desalojo de edificios y el derrumbe de parte del techo de un centro comercial. Las telecomunicaciones y los servicios de electricidad se vieron afectados temporalmente en algunas áreas, lo que dificultó la evaluación completa de los daños. Equipos de ingenieros y técnicos están trabajando para restaurar rápidamente estos servicios esenciales.
Los sismos son comunes en Filipinas, debido a que se encuentran en una región sísmicamente activa del Océano Pacífico. El palacio presidencial señaló que el presidente Ferdinand Marcos Jr. dio instrucciones a las agencias gubernamentales para garantizar la seguridad y el bienestar de todos los afectados por el sismo.