
Un duro golpe a la minería ilegal asestó la Dirección de Medio Ambiente de la Policía Nacional del Perú con el respaldo de 120 efectivos de la Dirección Nacional de Operaciones Especiales (Dinoes) y representantes del Ministerio Público. El personal ingresó a los caseríos de Coigobamba y Shiracmaca en Huamachuco, provincia de Sánchez Carrión, en La Libertad.
Los agentes iniciaron sus acciones desde las 5 de la mañana del domingo 5 de mayo. Gracias a la debida reserva ingresaron con relativa facilidad a la zona indicada para intervenir los campamentos de minería ilegal. La operación se realizó de forma simultánea en ambos caseríos logrando destruir 10 bocaminas, pozas de cianuración y maquinarias usadas para esta actividad ilícita.

Las primeras detonaciones alertaron a quienes dirigen las operaciones de minería ilegal, por lo cual un grupo de pobladores, vinculados a la ilícita actividad trataron de impedir la labor policial colocando troncos para cerrar el paso a Shiracmaca y coigobamba. Los efectivos del orden dispersaron a los más violentos con gases y disparos al aire.

De acuerdo a informes de inteligencia policial y de vecinos, delincuentes de la provincia de Pataz están en Huamachuco para trabajar en los socavones del Bosque Polo y en la zona que se intervino. El contingente de la Policía fue dirigido por el comandante Orestes Castillo Vásquez y la fiscal a cargo fue Lastenia Acuña Raza, de la Primera Fiscalía Provincial Especializada en Materia Ambiental de La Libertad.
El personal policial infiltrado identificó a un tal Carranza y al llamado “Chino” Márquez, sujeto que dirige una ronda vecinal, quienes desinforman a la población argumentando que las explosiones iban a destruir sus casas o que asesinarían a sus familiares. Según las investigaciones, estos agitadores responderían a las órdenes de la banda que opera en el bosque Polo, donde actualmente hay más de cuarenta socavones ocultos entre el follaje de los eucaliptos.