Una red de tráfico de bebés fue identificada en la región de Cusco. Recién nacidos eran vendidos a otras familias, así como eran comercializados para realizar pagos a la tierra.
La detención de integrantes de este grupo criminal ocurrió cuando acudieron al centro de Salud Manco Capac para obtener atención médica para un recien nacido. Sin embargo, personal de obstetricia sospechó de la supuesta madre, pues no había recibido control durante el embarazo, el parto fue domiciliario y no tenían registrado el nombre del padre en el acta de nacimiento de la RENIEC.
El rechazo del menor a la lactancia de la supuesta madre también fue clave para la identificación de estos inescrupulosos, que luego fueron puestos a disposición de la Policía.
Allí pudieron atar cabos que quien había firmado el certificado de nacido vivo era una bachiller en obstetricia, quien a la par era directora de una clínica obstétrica clandestina, ubicada a tres metros de la Plaza de Armas del Cusco, y donde se cree era el centro de operaciones de dicha red.
Según el Ministerio Público de Cusco, solo durante el 2023 habrían comercializado hasta 20 recién nacidos cuyas madres habrían dado a luz en esta clínica clandestina.
Entre los implicados en el caso están Fanny Hurtado Altamirano (45), Doris Rosa Huayhua (55) y Rubén Moran Cuyuchi (55).