
En el frontis de la sede de la Cruz Roja en la avenida España se encontró una granada de guerra de uso militar. El personal de la Unidad de Desactivación de Explosivos (UDEX) llegó rápidamente al lugar de los hechos para garantizar la seguridad de todos los presentes.
Bajo la dirección del especialista ST.1.PNP. Chuquimalqui Palacio, el equipo de UDEX procedió a llevar la granada de guerra a un campo abierto, donde se realizó su destrucción mediante una técnica de carga controlada por simpatía. Esta delicada operación garantizó que la granada fuera desactivada de manera segura, minimizando cualquier riesgo para la comunidad circundante.
Se espera que las autoridades investiguen el origen y las circunstancias de la presencia de esta granada de guerra en un lugar como la sede de una organización humanitaria.