
Unas cinco personas han fallecido y otras 5 han resultado heridas en el bombardeo ruso a la torre de televisión de Kiev, en Ucrania, que dejó, además, sin señal a los medios de comunicación.
Ante ello, el Servicio Estatal de Emergencia ucraniano comunicó el incidente desde su página de Facebook. Por su parte, el Ministerio de Defensa de Rusia había anunciado el ataque previamente para que residentes de casas cercanas las abandonaran.
«Advertimos a los ciudadanos ucranianos, utilizados por los nacionalistas ucranianos para llevar a cabo provocaciones contra Rusia, así como a los residentes de Kiev que viven cerca de los nudos de retransmisión, para que abandonen sus hogares», indicó la cartera rusa.
El ataque también afectó al complejo de Babi Yar, ubicado a los pies de la infraestructura, el cual es el mayor memorial de Ucrania en recuerdo a las víctimas del Holocausto nazi durante la Segunda Guerra Mundial.