
En medio de las investigaciones por la sospechosa licitación en Petro Perú contra el presidente de la República Pedro Castillo, el jefe de Estado pidió se le levante el secreto bancario, tributario y telefónico.
Y es que Castillo por medio de su bogado se ha puesto a disposición de la fiscal provincial Nora Córdova, de la primera Fiscalía Especializada Corporativa en Corrupción de Funcionarios Públicos.

Sin embargo, Castillo no estuvo dispuesto a brindar autorización a fiscales para que ingrese al despacho presidencial durante la intervención de ayer en Palacio de Gobierno.
Según el acta suscrita por el fiscal adjunto Luis Medina Rodrigo, a la Secretaría General de la Presidencia, Carlos Jaico Carranza, “informó que el presidente de la República es el que no autoriza el ingreso del personal fiscal a las oficinas del secretario del despacho de la Presidencia”.