Fiel a su estilo, el Papa Francisco aseguró estar vivo luego de ser hospitalizado en el Policlínico Gemelli, en Italia, después de que tuviera dificultades respiratorias tras su audiencia pública semanal.
Por otro lado, el Vaticano informó que el pontífice fue tratado con antibióticos administrados por vía intravenosa. Antes de partir, Francisco abrazó a una pareja cuya hija murió el viernes por la noche en mismo hospital.
Por su parte, Francisco agradeció al personal médico luego de su salida.
“Me viene a la mente una cosa que una vez me dijo un viejo, un hombre más anciano que yo, ante una situación como esta: ‘Yo, padre, no conozco la muerte, pero la he visto venir… ¡Es fea, eh!’”, contó entre risas a los reporteros.
El Vaticano confirmó que podrá presidir mañana domingo la misa de Ramos en la plaza de San Pedro, que marca el inicio de los ritos de la Semana Santa.