Los recién nacidos del hospital Belén de Trujillo corren riesgo sus vidas, al existir el desabastecimiento de insumos básicos para sus tratamientos y nutrición. Así lo denunciaron médicos del Departamento de Neonatología de dicho nosocomio.
A través de un pronunciamiento escrito, los galenos denunciaron que, desde diciembre del 2023, se observa un desabastecimiento de insumos básicos para la atención de recién nacidos, tales como ventiloterapia, infusión endovenosa, inotrópicos, antibióticos, clorhexidina, jabón, papel, etc.
Según refieren, este mes esto ha empeorado y ha generado que se suspenda tratamientos u optar por otros que no son óptimos. Actualmente, no se cuenta con corrugados para CPP nasal, corrugados para ventilador mecánico, cánulas de alto flujo, necesarios para oxigenoterapia.
Tampoco tienen equipo de infusión con línea de silicona, líneas de infusión radiopacas, introcan 24; necesarios para administración de hidratación endovenosa, infusión de medicamentos.
Consecuencias
Los médicos asistenciales sostienen que esta situación ha generado que los padres de familia asuman los costos altos diariamente. Además, los profesionales de la salud se han visto obligados a suspender la nutrición parenteral total a algunos bebés por falta de insumos. Esta es, en algunos casos, la única forma de alimentación del niño.
Centralismo causa desabastecimiento
Por su parte, el decano del Colegio de Químico-Farmacéuticos de La Libertad, Jaime Flores Ballena, manifestó en N60 que uno de los factores de desabastecimiento de medicinas en los establecimientos de salud públicos es el centralismo en el sector.
“Desde que el abastecimiento se centralizó a través de Centro Nacional de Abastecimiento de Recursos Estratégicos en Salud (Cenares), casi todos los recursos se asignan en un 40% para compras de productos de más alta rotación a través de Cenares”, aseveró Flores.
El profesional añadió que se busca que la fuente de financiamiento, que son los Recursos Directamente Recaudados (RDR) sirvan para satisfacer la compra de estos medicamentos. “A veces los requerimientos que se hacen en abril, pasan dos o tres meses para hacer la adquisición y eso es un escándalo porque tiene que hacerse rápido. La vida del paciente está por encima de todo y hay que priorizar”, acotó.
