
Aunque fue ayer cuando el representante de Defensa Civil nos aseguraba que se estaba priorizando los trabajos de control de protocolos covid -19 en los mercados, este no es el caso de la Hermelinda, donde se comprobó la grave violación que existe de las medidas sanitarias contra la enfermedad.
Desde los exteriores del centro de abastos ya se identifica un caos vehicular originado por la aglomeración de ambulantes en la zona, quienes hace pocos meses fueron noticia al contraer, en su mayoría, el coronavirus y convertirse en foco infeccioso de este mal.
La realidad no es nada diferente al interior del mercado, pues vendedores y comensales se movilizan sin mascarilla, implemento necesario para evitar la propagación del covid-19.
Desde ancianos y menores de edad permanecen expuestos al no contar con protección facial, situación que empeora pues las personas se aglomeran para adquirir sus productos sin respetar la disposición del distanciamiento.
Ante ello no es sorprendente que las autoridades estén analizando solicitar la aplicacion de una cuarentena focalizada para la región ante a un latente rebote.