
El gerente regional de Salud de La Libertad, Fernando Padilla, se pronunció sobre el caso ‘vacunagate’, en el cual se vieron favorecidos tres médicos liberteños e indicó que, sobretodo, es una falta ética.
«Dentro de la ética es una falta, no solo para médicos sino funcionarios y familiares que se han visto beneficiados con estas vacunas. Han sido situaciones individuales, personalizadas, ya sea por tener contactos que hayan tenido el acceso«, sostuvo en conferencia de prensa.
Además, aclaró que de los tres médicos liberteños que se vieron favorecidos, dos de ellos viene laborando en Lima desde hace algunos años.
«De los tres médicos, la doctora (Claudia Cedano) trabaja en Lima, el doctor (Manuel Cedano) trabaja en IREN pero no se tenía conocimiento de que se haya vacunado. Otro médico (Javier Masías) no está en la región, es un exfuncionario de la Geresa, pero ya lleva dos años en la ciudad de Lima haciendo residencia de epidemiología», alegó.
Defiende a epidemióloga
Finalmente, refirió que no había conversado con la doctora Ana María Burga, jefa de Epidemiología de la Geresa, teniendo en cuenta que su hija y el padre de la misma están involucrados.
«La doctora Burga viene exponiéndose, trabaja todos los días, no desmerece su trabajo y lamento que sus familiares sean involucrados, pero ella no está en ninguna lista, y por eso no he tenido que conversar con ella si está o no involucrada», enfatizó.