
El alcalde provincial de Trujillo, Mario Reyna, se pronunció tras la vacancia de la ex presidenta Dina Boluarte, reconociendo que su gestión brindó cierta estabilidad económica, aunque no logró resultados en materia de seguridad ciudadana ni en la lucha contra la delincuencia.
“Boluarte no lo hizo completamente mal. Dio un pequeño impulso de estabilidad económica, pero su gran debilidad fue la incapacidad para enfrentar de manera eficaz a los oligopolios y al crimen organizado y común”, señaló el burgomaestre.
Respecto al nuevo jefe de Estado, José Jerí, Reyna expresó que no espera grandes cambios, aunque confió en que tenga la determinación y coraje necesarios para exigir al Congreso la aprobación de un paquete legislativo que fortalezca la lucha contra la criminalidad. “Nos visitó en la municipalidad cuando era congresista y le deseo lo mejor, pero esto no se trata de personas, sino de una estructura política deteriorada”, afirmó.
Asimismo, recordó que la inestabilidad política ha sido una constante en los últimos años, con ocho presidentes en menos de una década, lo cual —según dijo— demuestra la fragilidad democrática del país.
Por último, el alcalde trujillano subrayó la necesidad de reconstruir la institucionalidad política y fortalecer los partidos con líderes responsables. “Sacar adelante al país exige consensos, pero en el Perú eso no existe. Se antepone el interés político antes que el bienestar común. Debemos tener partidos con personas serias y no con quienes solo buscan beneficios personales”, concluyó.

