Cada 30 de agosto se celebra el día de la enfermera peruana, lamentablemente las denominadas «guerreras turquesas», no han sido ajenas a perder compañeras en esta batalla contra el coronavirus.
Sin embargo, desde que se inició la pandemia, debido a las condiciones precarias en las que tenían que trabajar las licenciadas han sufrido 173 pérdidas, tras enfermar gravemente de coronavirus.
En el Día de la Enfermería Peruana, se destaca la labor de una profesión que es mayoritariamente femenina, la cual constituye la primera fuerza en el sector salud.
Personas que luchan día a día, desde cada rincón del país, priorizando la defensa de la vida de cada ciudadano incluso poniendo en riesgo sus propias vidas.
Discriminación y reconocimiento
Para La Rosa Huertas, las enfermeras viven en una constante lucha de discriminación, posicionamiento y búsqueda de reconocimiento, a diferencia de lo que ocurre con el personal médico.
«Nosotros somos ‘cuidadólogas’, somos expertas del cuidado de la salud y el bienestar individual y colectivo y ejercemos nuestra profesión en forma autónoma e interdependiente. Eso es enfermería”, menciona Liliana La Rosa, decana del Colegio de Enfermeros del Perú.
Primer nivel de atención
Liliana la Rosa Huertas, recomendó hoy en su reunión con el ministro de salud, Hernando Cevallos, fortalecer el primer nivel de atención, así como crear brigadas de enfermería para vacunación domiciliaria.
«Hay que fortalecer primer nivel de atención. Que se contraten cinco mil brigadas antes de tercera ola por el COVID-19. Hay 22 mil enfermeras desempleadas. Este es el momento para evitar negligencia social», mencionó la Decana Nacional del CEP.